cosultoria

Tener una vida productiva y ser más eficientes da como resultado una vida más feliz, y por supuesto que la felicidad tiene que ver mucho más con disfrutar lo que la vida nos ofrece. Un enfoque de agradecimiento por lo que ya tenemos es uno de los ingredientes más importantes para ser feliz. Cuando experimentamos esa sensación de felicidad por disfrutar lo que la vida nos ofrece, es que podemos entonces inspirarnos para cambiar y mejorar nuestra vida.

Esto es una paradoja, ya que muchas personas buscan lograr objetivos o cambiar su vida porque no la aceptan, viven con sufrimiento y lo hacen desde la “no aceptación”. Es como querer bajar peso porque no acepto, ni amo mi cuerpo, este es un ejemplo de los cuales son frecuentes en mi práctica de coaching.

La realidad es que las personas pueden ser más eficientes cuando se aceptan y aman, cuando valoren tener brazos y piernas, y lo agradecen, entonces desde la aceptación y amor pueden cuidar algo que aman que es su cuerpo, con ello cuidar lo que ingieren como alimentos y brindarle a su cuerpo, que aman, los cuidados que necesita, las atenciones para que esté en bienestar, balance, armonía, para que luzca bello.

Cuando valoras lo que te ofrece la vida, actúas desde el amor, y por ello puedes transformar y “sacarle” más provecho, generando más valor, de la misma forma que el ejemplo de la persona que desea bajar de peso lo hace con mayor eficiencia cuando se acepta y ama.

¿Qué agradeces de tu vida?, ¿qué amas de tu vida para mejorarlo aún más?, tal vez tus hijos, tu familia, tu sentido de ser valioso y reconocido por los que quieres, o tal vez tu sentido de dejar un legado o contribuir con algo que sea valioso, o simplemente mejorar tu calidad de vida material y sentirte capaz.

Te comparto algunos consejos para que, desde la aceptación, agradecimiento y amor, puedas ser más eficiente en lograr lo que deseas en la vida. Este proceso es algo que realizo con mucha frecuencia en nuestra práctica de coaching y que ha ayudado a muchas personas a mejorar su vida.

#1 Tener objetivos claros

Cuando no sabes a dónde vas, todos los caminos lucen aceptables, puedes tomar cualquier ruta. Imagina por un momento que te subes a tu automóvil, lo prendes y un segundo antes de iniciar tu marcha piensas a dónde ir y no sabes. Si no sabes a dónde te diriges lo demás no tiene sentido, solo andarás en el automóvil por la ciudad sin un destino, y llegarás a lugares que puedes disfrutar y otros que no, pero el punto es que no tienes un rumbo.

Tener objetivos claros es lo más importante cuando quieres mejorar la calidad de tu vida, aprovechar el tiempo en esta vida, que por cierto pasa a una alta velocidad. Tener una sesión con una persona entrenada en coaching para que te ayude a definir tus objetivos, es una actividad que vale mucho la pena realizar. Los objetivos deben ser muy claros, estar planteados en positivo, tener una manera clara de medir el progreso y saber cuándo ya los hemos cumplido, ser holísticos y no afectar negativamente otras áreas de tu vida, ser congruentes con tus creencias.

#2 Escribir los beneficios más significativos de lograr mis objetivos

Alcanzar o lograr objetivos valiosos que no hemos logrado antes, requiere de un gran esfuerzo, muchas veces de cambiar formas de pensar, sentir y actuar, y por ello requiere de mucha motivación. Por eso que es muy importante imaginar, sentir y luego escribir con mucha claridad los beneficios que tendremos al lograr nuestros objetivos, ya que esto genera la motivación que es el combustible durante el trayecto.

Muchas veces nos planteamos objetivos que luego abandonamos porque no seguimos rituales en los que recordamos y sentimos las sensaciones de los beneficios que nos dará ese esfuerzo. Recordar y vivir en nuestra imaginación esos beneficios, sentirlos nos proporciona motivación, la cual necesitamos durante todo el viaje y no solamente al inicio del mismo. Escribirlos, pensarlos periódicamente, generando imágenes y sensaciones relacionadas con los beneficios y sensaciones de placer es una de las actividades que tenemos que estar constantemente realizando.

Esta práctica tiene implicaciones incluso neuronales que re-establecen el estado que necesita nuestra mente para organizar y provocar cambios en nuestra vida. Al imaginar nuestro cuerpo no reconoce que lo imaginado aún no es real, y lo considera como real. Si continuamos esta práctica, nuestro cerebro y mente establecen patrones en donde lo que imaginamos es algo posible, deseable y normal adquirirlo, preparamos el estado mental para lograr los cambios que necesitamos.

#3 Meditar por la mañana

Nuestro cerebro genera rutinas automatizadas de pensamientos y sentimientos. La meditación ayuda a “romper” con estos patrones automatizados y nos abre nuestra mente a la creatividad, a experimentar más posibilidades de actuar. Por ello aprender a meditar, es tal vez, la estrategia más importante para lograr nuevos y emocionantes objetivos.

Sin embargo, muchas personas tienen desconocimiento sobre lo que es realmente la meditación y lo asocian a prácticas religiosas o de culturas occidentales que se enfocan a “engrandecer” creencias universales distintas a nosotros. Esto puede ser cierto en el sentido de cómo otras culturas históricamente han utilizado la meditación para generar esta “limpieza” o claridad mental, pero no quiere decir que nosotros en el mundo moderno y occidental no las podamos utilizar, nuestra mente funciona igual para todos los seres humanos.

Al meditar reconoce las sensaciones de tu cuerpo, escucha y experimenta tu entorno con mucho detalle, pon tu atención en lo que verdaderamente existe, en lugar de hacerlo en lo que tu mente está creando y que es lo que te genera un mapa equivocado y limitado. Puedes aprovechar para agradecer y tener un sentimiento de gratitud y compasión, ello será importante para lograr tus objetivos.

Los primeros consejos se refieren a lograr clarificar nuestros objetivos, escribir y practicar rutinas de motivación sobre los beneficios que tendremos al lograrlos, y practicar la meditación como una forma de “limpiarnos” de los patrones de pensamientos y sentimientos ya programados que nos limitan para experimentar nuevas oportunidades. 

A continuación, te compartiré otros 3 consejos para que puedas llevar tu vida a ese nivel y lograr objetivos que sean significativos en la calidad de tu vida, y me refiero desde lo material, lo emocional, las relaciones e incluso a nivel espiritual (que muchas veces lo confundimos con lo religioso).

#4 Tomar un curso o leer un libro cada mes

El aprendizaje continuo o transformación es una de las características de la vida ya que todo siempre está cambiando, de hecho, uno de los principios del mismo universo, le llaman “La ley de la permanencia”. Ponte a pensar, todo está cambiando todo el tiempo, el mismo minuto que ha pasado mientras estás leyendo este artículo contiene elementos de cambio, o por ejemplo la formación de las nubes en el cielo, o una flor que nace, crece, florece, esparce sus semillas y muere.

Lo que sucede es que muchas cosas cambian a una velocidad en la cual no percibimos su cambio, pero no lo dudes todo está cambiando todo el tiempo. La era digital viene con una característica que es la aceleración de la velocidad en los cambios, por ello ahora los cambios son exponenciales y podemos percibirlos con mayor claridad. No significa que antes no cambiaban las cosas, solo que los cambios eran a una menor velocidad, eran cambios lineales, ahora son de alta velocidad y exponenciales. Si no estás aprendiendo nuevos conocimientos y teniendo nuevas experiencias a una velocidad más alta, puedes perder la oportunidad de tener un mejor mapa, o de navegar con instrumentos equivocados o de poca ayuda.

Aprender a alta velocidad es lo que deberían de estar enseñando a las escuelas ahora. Ponte a pensar, cuando en la escuela te enseñan conocimientos al momento de salir, después de 4 años de universidad, esos conocimientos ya son obsoletos, no solo eso, sino más grave aún, los programas y contenidos de educación se actualizan a una velocidad muy lenta, mientras que los grandes descubrimientos en la ciencia están acelerando y cambiando lo que conocemos a una alta velocidad.

No solo estamos teniendo nuevos conocimientos en medicina, biología, neuro-ciencia, nanotecnología, comunicación, física, sistemas computacionales, modelos de negocio y muchas otras áreas, sino que esta nueva información está disponible y tenemos libre acceso a ella, eso pone aún en mayor crisis la oferta de educación formal que se mueve lentamente. Como sabes información es poder para generar valor y entender mejor nuestro entorno. Si no estamos aprendiendo nuevos conocimientos cada semana, cada mes, entonces estamos en un alto riesgo de llegar a conclusiones obsoletas o incompletas. Por supuesto este proceso es continuo, por ello disfrutar y aprender a aprender es la clave. Aprende a aprender, a veces la manera en que decimos este principio es aprende a desaprender. Puede aplicarse ya que es vivir desapegado a los conocimientos y estar abiertos a nuevos descubrimientos e información que muchas veces son distintas a lo que creíamos como cierto toda nuestra vida.

Leer un libro del tema de tu interés o profesión cada mes, revisa un seminario en internet cada semana del tema, revisa esa información en internet, asiste a un curso o seminario cada 3 meses. Si tu tiempo no te lo permite, busca hacerlo lo más frecuente que puedas. Recuerda el viejo relato “no tengo tiempo para afilar el hacha porque tengo muchos árboles que cortar.”

#5 Hacer 10 llamadas telefónicas o reuniones diarias con personas que puedan colaborar con tus objetivos

La interacción con las personas es irremplazable, en esos espacios obtenemos nuevas ideas, soluciones, referencias, experiencias, en una palabra, mucho valor. Es muy frecuente que en este momento de conectividad por internet y redes sociales perdemos el contacto presencial. Esto representa una gran paradoja, ya que vivimos en la era de la conectividad, pero ello nos desconecta en ciertos procesos de las personas. No se trata de no utilizar las nuevas tecnologías para conectarnos, por el contrario, se trata de ir más allá, utilizándolas, pero no reemplazarlas por el contacto personal.

Podemos ser más eficientes en nuestro tiempo, que es el recurso más preciado, utilizando las tecnologías de conectividad para llegar a más personas, pero en momentos determinados busquemos a las personas para entender mejor la forma en que piensan, entender su talento o necesidad y ver cómo pueden colaborar en tus objetivos. Posiblemente ya sabes que pueden aportar, y el motivo de reunirte con las personas o llamarles es para entender cómo ellos estarían motivados a colaborar contigo.

Esto aplica mucho en las ventas, en el trabajo en equipo en una empresa, pero también aplica en tus objetivos. Por ejemplo, si dentro de tus objetivos es mejorar tu alimentación, a lo mejor quieres reunirte con tu amigo nutriólogo o con un amigo que aprendió a mejorar su alimentación y bajó de peso: quieres saber cómo lo consiguió e incluso como te puede ayudar con su experiencia.

Lo mismo aplica a personas que lograron hacer funcionar un negocio, o pueden darte referencias de proveedores, contactos, experiencias, recursos, conocimiento, o comprar tu producto o servicio para beneficiarse, etc. Busca hablar o reunirte con 10 personas al día entre clientes, colaboradores, familiares, amigos, proveedores, posibles aliados, clientes prospectos, maestro, tu coach, y cualquiera que puede apoyarte en tus objetivos.

#6 Escribir un diario

El verdadero aprendizaje se da cuando puedes reflexionar sobre tus emociones, posibilidades, y analizar con una perspectiva reciente. Escribir tus experiencias puede ser tu mejor práctica para darle seguimiento a tus objetivos.

¿Estás haciendo lo que requieres hacer?, ¿estas enfocado?, ¿qué nuevo has aprendido?, ¿cómo va tu progreso?, ¿lo que estás haciendo está relacionado con tus objetivos?

Rendir cuentas es la mejor práctica, ya que permite generar momentos de reflexión y evaluación. Por ello nosotros creamos la plataforma de coaching que permite a las personas clarificar sus objetivos y vivir este proceso en forma estructurada, rindiendo cuentas sobre sus acciones y teniendo aprendizaje de su retroalimentación. Lo más importante teniendo una estructura de seguimiento y colaboración constante hasta lograr nuevos hábitos ¡que te lleven a enriquecer tu única vida!

¡Pon en práctica estos consejos y lleva tu vida al siguiente nivel de éxito y felicidad! ¡Te deseo una vida llena de propósito y mucha alegría!

Mauricio Bustos Eguía